La migración determina e incluye procesos desafiantes para quienes, por las razones que sean, optan por salir de sus lugares de origen en busca de un mejor futuro. Si bien es cierto que la experiencia migrante es subjetiva, los múltiples testimonios de personas migrantes de sur a norte reflejan las complejidades de los procesos de movilidad que encierran aprendizajes sobre los encuentros, los logros, las pérdidas, las afrentas cotidianas y las violencias. En el caso de las mujeres en migración forzada, las vulnerabilidades marcadas por las condiciones de multiseccionalidad plantean dilemas y problemáticas complejas que van desde las salidas de sus comunidades hasta sus destinos de acogida. El cuidado de las necesidades básicas propias y ajenas durante los recorridos y estancias es un proceso vivido por ellas de maneras muy peculiares, ya sea que el destino final sea una ciudad fronteriza o un campo jornalero.
En un momento en el cual los cuidados están en el debate público como temática central de género, aquí se presentan casos de estudios y ensayos sobre mujeres, infancias y cuidados en escenarios de movilidad, con la intención de delinear ejes para las mejoras y creación de políticas públicas que apunten al respeto por la dignidad humana.