A la ciudad de Tijuana la definen, además del trazo de sus calles, de la disposición de sus casas y de su fisonomía urbana: el sentido mismo de su historia, un pasado más o menos reconocible, ciertos símbolos, dos o tres lugares típicos, su condición de ciudad fronteriza y, de modo muy significativo, toda la cauda de mitos y leyendas que ella misma ayuda a fomentar con singular empeño. Poco importa si a la postre la imagen que de ella deviene se corresponde o no con la realidad social que le diera origen. Si mucho de cuanto se ha ido incorporando al imaginario de la ciudad resulta poco creíble o carece de posibles asideros de verificación empírica; todo, a fin de cuentas, habrá de contribuir para establecer la representación imaginaria de Tijuana como una ciudad abierta a la disipación y al vicio.

Introducción

Primera parte: Construcción de escenarios

Tijuana la horrible

Tablero de definiciones

Segunda parte: La gestación del mito

The Heaven of Hedonism

The Man who Built Tijuana

A Wide Open City

Una heterotopía llamada Tijuana

Looking over the Border

Tercera parte: La aparición del mito

La leyenda negra

Babilonia, la gran prostituta

El mito de Tijuana

The Sin City

Cuarta parte: La presencia en la literatura

Un espacio para el mito

The Hellish Mexican Town

Tijuana no es México

Quinta parte: La mitología de Tijuana

La imagen en el cine

Tijuana rima con marihuana

Tijuana es un thriller

Sexta parte: La imagen pública en conflicto

La ciudad sin metáforas

Las metáforas de la ciudad

La madre de todos los vicios

Conclusiones generales

Bibliografía

Acerca del autor