No fue una sorpresa que en las elecciones de 2018, en México, ganara el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), una alternativa distinta a las que ya habían gobernado al país, las cuales dejaron saldos negativos en casi todos los ámbitos de desarrollo. Con una votación mayoritaria, el nuevo Gobierno federal emprendió una serie de reformas sociales que prometían cambios de gran envergadura –enmarcados en la autodenominada «cuarta transformación»–, cuyos propósitos centrales fueron terminar con el legado neoliberal y mejorar el bienestar de las familias mexicanas.
En 2020, durante el segundo año de gobierno, se presentó una emergencia sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19. Lo anterior paralizó en gran medida las actividades económicas del país, redujo la capacidad recaudatoria y obligó a reorientar una parte de los escasos recursos públicos para cubrir las necesidades derivadas de la atención médica, las cuales se extendieron con cierta intensidad hasta finales de 2021.
Con ese contexto, en este libro se aborda el estudio de las modificaciones a las políticas y los programas sociales que fueron implementados para enfrentar las repercusiones de la pandemia, así como los desafíos que les depara en el futuro cercano, tanto en el ámbito de la salud pública como en otras áreas de política cruciales para el bienestar social, tales como las reformas laborales, la seguridad social, la política energética, la atención a la pobreza, la desigualdad, el abandono escolar y la violencia de género.